Entramos en un mes cargado de reencuentros felices, muchos de ellos gastronómicos. Hasta ahí, pura felicidad. Si no fuera por el incremento de desperdicios alimentarios que implica. Algo hiriente por la perdida de los recursos que se emplearon para producirlos. Más hiriente aún si aludimos a un derecho humano que no llega a todas las mesas.
Nos ponemos manos a la obra con el finde incorporar a nuestro día a día herramientas que nos ayuden a revisar nuestros hábitos, para que "nos pongamos fácil" no desperdiciar nada que pueda ser llevado a la boca. Por justicia.
Y, como todo lo hermoso, lo recopilamos en colectivo:
Luisa Gómez nos habla de "la cocina para un regimiento" y del rescate de alimentos de calidad, a través por de lugares como https://www.remolonas.com/
Beatriz Fadón, la presidenta de la Asociación paisaje, ecología y género (https://www.asociacionpaisaje.org ), y experta en sistemas alimentarios sostenibles nos da multitud de consejos para que nuestra propia cocina sea justo eso, "un sistema alimentario sostenible".
Nos muestra ejemplos concretos de ello desde "las confidencias en su cocina", Patricia Pérez, que nos da una lección magistral de aprovechamiento culinario que empieza con un cocido y termina con forma de croqueta. ¿Imaginan algo mejor? Preparen el tupper, que si sobra alguna (?¿?), estaremos felices de que se las lleven para volver a saborearlas mañana.Otra práctica maravillosa que en los restaurantes se extiende cada vez más. Y a la que nos unimos.
Terminamos con la propuesta de María Díaz que nos recomienda la aplicación "Too good to go" https://www.toogoodtogo.com/es una iniciativa que cumple diez años y que salva de terminar en la basura toneladas de comida de restaurantes y comercios, y a precios geniales. Nos lo explica con coherencia circular, el responsable de prensa del proyecto, Carlos García.
Todo bajo la realización de Javier Iglesias que hace tiempos de radio que no tienen desperdicio.
¡Buen provecho!