La agricultura no necesita solamente un relievo generacional sino además le hace falta un relievo de nuevas ideas para impulsar la. Marcos con su iniciativa de producir esponjas vegetales para la higiene personal, a parte de poner una nueva idea en practica, lo hace en un pequeñissimo pueblo de 120 habitantes, desolado por la despoblación y el abandono de sus tierras. Con su pequeña empresa devuele la ilusión a las futuras generaciónes de que se puede vivir de la agricultura dignamente y hasta que se pueden generar puestos de trabajo para que vuelvan a asentarse personas en el medio rural. Aqui Marcos nos cuenta sus primeros pasos y sus perspectivas de crecimiento.